Aprovechando los tiempos que corren, os muestro una de las obras más espectaculares de Antonio Salieri, bastante indicada para estas fechas. Que la disfrutéis, y que disfrutéis también esta Semana Santa.
Antonio Salieri -quien ni mató a, ni tenía celos de Mozart-Nació en Legnano Véneto, (cerca de Venecia) en 1750, su hermano Francesco lo instruyó en la música, pero al quedarse huérfano es adoptado por una familia que le permite dedicarse a la música; así estudió con Tartini y fue re-adoptado por Gassmann quien lo llevó a Viena. Allí, Salieri se ganaría el favor del emperador José II, siendo el maestro de capilla de éste.
Ante tal panorama Salieri se convertiría en el mejor operista italiano y su fama sería tal que se tendría que desplazar, en una ocasión, hasta París para componer en la corte de Luis XVI.
Su producció-casitida vocal- incluye 40 óperas, 6 misas, 3 oratoris, varias cantatas, arias de concierto, fugas, conciertos para piano, flauta y oboe, oboe violín y cello-entre tantas otras.
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